Existe la creencia de que los profesionales de la fotografía sólo utilizan el modo manual para realizar su trabajo. Esto es falso: cada modo de disparo tiene una utilidad que un buen fotógrafo debe saber aprovechar.
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Cada modo de disparo en una cámara fotográfica tiene sus usos y estos están determinados por el tipo de objetivo que se quiere retratar. ¿Cuándo se debe utilizar cada modo? Veamos.
Modo manual
Este tipo de disparo permite manipular completamente aperturas y tiempo de exposición. Con esta condición, el uso de flashes y trípode, es posible realizar fotografías de estudio o nocturnas.
Los profesionales de la fotografía usamos el modo Manual o M en exclusividad cuando disparamos en estudio y con flashes, con luz continua y luz natural solemos disparar en M, pero también mucho en Av (prioridad a la apertura) y P (programado).
ISO automático
Esta condición, aún estando en manual, es factible para momentos en los que la luz cambia
Modo automático
Este modo permite captar movimiento ya sea en exteriores o en eventos concurridos. El fotoperiodismo, por ejemplo, tiene que apoyarse mucho en la tecnología y ventajas que ofrece el modo manual… ni modo que para captar un hecho relevante e irrepetible te tomes el tiempo de medir la luz y la profundidad de campo para hacer la mejor toma.
Por último te decimos que lo importante es saber adaptarse a lo que necesites en un momento determinado. Al final de cuentas, lo más importante es que tu encuadre tenga la mejor composición.
Fuente: Light Home