Todavía hay quien tiene la idea de que la aplicación de tatuajes es una actividad burda, que carece de técnica y control de calidad y que -todavía- representa a un estilo de vida negativo y cercano a la malvivencia, de seguro se trata de personas más bien retrógradas, porque la cultura del tatuaje se ha desarrollado con gran velocidad y su uso se ha generalizado durante los últimos años.

Quien se dedica a la aplicación del diseño generalmente es especialista en ilustración profesional o se dedica a alguna otra rama de la imagen gracias a una formación académica formal, pero esto no quiere decir que cualquiera que haya estudiado creatividad visual pueda dedicarse a aplicar tatuajes.

Para comprender la tarea que los profesionales de la aplicación del tatuaje llevan a cabo de manera cotidiana consultamos a la creativa mexicana Paloma Araneda, quien bajo el nombre de Icarus atiende a una clientela cada vez más nutrida desde su estudio en la Ciudad de México.

Paloma describe su labor como la de una profesional de los trazos:

“Me considero, antes que nada, ilustradora. Yo estudié en la Escuela Nacional de Artes Plásticas la carrera de Diseño y Comunicación Visual tomando la especialidad de Ilustración a partir de la mitad de la carrera”.

Para trasladar sus conocimientos a la técnica del tatuaje, Icarus tuvo que acercarse a ella, enfrentarse a algunos prejuicios que existían y descubrir que se trata de un espacio profesional tan serio como todos los demás que involucran a la imagen.

La labor diaria de Paloma requiere de mucho esfuerzo, su agenda se llena constantemente de compromisos profesionales y ha tenido que acostumbrarse a un trabajo en el que debe estar concentrada de manera permanente tanto en el diseño de los tatuajes que desarrolla como en su apĺicación.

Cuando le preguntamos cómo describe su labor, esto fue lo que Paloma nos respondió:

“Siento que el tatuaje es una dualidad. Por un lado como actividad profesional. Con la apertura del tatuaje la actividad y el mercado se ha vuelto más especializado y con mucha mayor propuesta gráfica. Considero que debe hacerse con un cuidado total en cuanto a seguridad de higiene y trabajo técnico. Las personas merecen un proceso confiable un espacio que les brinde seguridad.

El resto de la conversación que tuvimos con Icarus lo puedes encontrar en la edición de mayo de Paredro, revista digital que puedes descargar si pulsas esta liga.