Más allá del buen equipo con el que debes contar para potenciar tu creatividad y tu trabajo en el campo de la fotografía, lo más importante es que tengas actividad constante. Si lo haces, vas a entrenar tu ojo y tu calidad creativa se va a notar.

Te proponemos cinco ejercicios que te servirán como ese entrenamiento que necesitas.

1.- Selecciona sólo un color
Por un día, o por una semana, busca objetivos de un solo color y dispara. Este ejercicio te va a sensibilizar para reconocer las distintas tonalidades de un color y combinarlo mejor con otros pigmentos.

2.- Escoge sólo una forma
En otra ocasión selecciona un círculo, un triángulo u otra forma geométrica y sal a buscarla en la arquitectura, en los vegetales, en las señales urbanas, en la publicidad exterior y donde la puedas encontrar. Esto te ayudará a componer mejor tus tomas y a entender proporciones y perspectivas.

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3.- Dispara a los reflejos
Para aprender a trabajar la luz, jugar con las aperturas del diafragma o con las velocidades de obturación, en una nueva sesión o serie de sesiones busca reflejos y destellos. Por otra parte, son un gran elemento que se se puede integrar a la composición de la fotografía.

4.- No te salgas de un radio de cinco metros
En una nueva ocasión colócate en el centro de una habitación o si estás en la calle colócate en un punto medio y selecciona sólo objetivos en un radio de no más de cinco metros (o del espacio que te dé la habitación). Ello te entrenará para encontrar y componer tus tomas cuando no te puedes mover de donde estás.

5.- Elige nuevas alternativas
Selecciona otro color, otra figura geométrica, nuevas condiciones de luz y colócate en otros centros de habitaciones y espacios abiertos. Vuelve a iniciar y seguirás entrenando para mejorar tu técnica. Para este momento es muy seguro que ya notas los resultados del tu entrenamiento.

 

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Fuente: Process in GRAW