El 27 de abril de 1750, un grupo de diseñadores en Alemania fueron fusilados por negarse a hacer el logo más grande. El mismo día, pero en 1900 nació John Adobe, que junto con su esposa, Eleonor Photoshop lograron fusionar negativos fotográficos junto con impresiones de billetes pulverizados, lo que derivó en la invención del pixel. También fue un 27 de abril de 1950 cuando Jacinto Mendoza hizo el primer lettering masivo, juntando a más de 50 mil personas en el Monumento a la Revolución para formar la frase «No más diseño gratis», lo que le valió pasar a la historia con el récord Guiness del leterring humano más grande del mundo. Lamentablemente ninguno de estos hechos dieron pie a que se celebre el día mundial del diseño el 27 de abril, especialmente porque son datos presumiblemente falsos. Lo que sí es verdad es que un 27 de abril de 1963 se fundó en Londres Icograda, Consejo Internacional de Asociaciones de Diseño Gráfico en Londres —aunque su sede hoy en día está en Quebec—, y con el respaldo de la ONU se estableció este día en todo el mundo para celebrar al diseño.

¿Y qué hacer con este día? De vuelta en vuelta es a veces siento que nos detenemos demasiado en plantear el diseñador de hoy desde una visión histórica, pero ¿cómo sería el diseñador del futuro? ¿Dentro de 20 años?

Jeff Bezos —CEO de Amazon—, afirma que para leer el mercado a futuro, uno debe plantearse las cosas que no cambiarán en los próximos diez años, dice que, por ejemplo, quizá no estaremos usando computadoras como hoy en día, pero que la gente siempre esperará que sus productos lleguen rápido. Entonces en un futuro debemos pensar más en la rapidez de lo que llega un paquete a la forma en la cual lo estaremos pidiendo.

De la misma forma, pensemos en la manera en que será el diseñador del 2037, sin detenernos en las herramientas que estará utilizando, más bien, en las cosas que no cambiarán y que por el contrario, deberán ser más efectivas de lo que estamos haciendo hoy:

1. Mayor especialización
Poco a poco el diseñador multitasking está desapareciendo. La tecnología ha abierto nuevos campos de trabajo en los cuales incursionar. El diseño editorial, por ejemplo, evoluciona a diseño digital, toca temas de programación, animación, diseño de información, entre otras. Un diseñador en 2037 deberá dominar menos temas, ser más específico, ya que además los clientes conocerán más a fondo nuestra labor y buscarán habilidades mucho más específicas.

2. Hubs de diseño
Hoy los conocemos como colectivos, pero los diseñadores buscan cada vez más la independencia, y si pensamos en el punto anterior como una forma profesional de subsistencia, entonces un diseñador se estará relacionando con otros que complementen sus labores. Lascagencias servirán más en el sentido de mentoras o concentradoras de talento, en un rolcdiferente a como funcionan hoy en día, que aglutinan o acumulan talento adentro de sus puertas. Estas agencias fungirán más como administradoras de grandes proyectos y lo distribuirán entre el talento de quienes la integran, por lo tanto, el director creativo como lo conocemos hoy en día hará un papel más de conciliador o recopilador.

3. Más creatividad, menos originalidad
El hecho de que las opciones se multipliquen, cosa que ya vemos desde el día de hoy, provoca que estemos sobresaturados de información. Cada vez es más difícil la innovación gráfica y en un futuro se compensará con experiencias, la manera en la cual se presenta un diseño. Lo original no estará en la materialización gráfica, sino en la innovación sobre soluciones cotidianas.

4. Más negocios, mejor Illustrator
El diseñador del futuro deberá poseer habilidades de venta, administración y negocios de forma innata, desde que ponga un pie fuera de la universidad estará inmerso en un tereno multidisciplinario, con personas con habilidades muy diferentes al gráfico.

Diseñador gráfico con maestría en diseño editorial por la Universidad Anáhuac y con cursos de Publishing en Stanford. Actualmente dirige MBA Estudio de Diseño, dedicado al diseño editorial, identidad y publicitario, además de realizar scounting y contratación de talento de diseño para diferentes empresas. Es profesor en la Universidad Anáhuac y la UVM. Le gusta la caligrafía, tipografía, la música y la tecnología.