Crear un empaque tiene el objetivo de proteger el artículo, eso lo sabemos, pero qué pasa cuando por errores de diseño, los afectados no sólo son los productos, si no que también lo es la reputación de la marca. Con ello en mente te mostramos las equivocaciones de packaging más comunes que debes evitar.
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1. Empaque no funcional:
Sí, podría sonar absurdo, pero en ocasiones los diseñadores crean piezas excepcionales, llenas de colores, texturas o tipografía llamativa, pero esto no significa que preservara de manera adecuada los productos, que sea sencillo desempacar o que simplemente no es funcional, no debes perder este objetivo.
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2. No saber que producto es:
El empaque debe trasmitir una idea sobre el producto que transporta, pero en ocasiones el diseño puede provocar confusiones sobre qué es y representar otro artículo totalmente diferente. Esto podría no parecer importante, pero imagínate alguna bebida con un packaging que simule un frasco de cloro… No lo probarías, ¿no?
3. No tener una estrategia:
No se trata sólo de presentar un nuevo diseño y ya, tiene que tener una estrategia respaldada con una investigación previa, así como un desarrollo que tenga un objetivo (para qué público y con qué motivo) así como una táctica para la promoción.
4. Copiar a la competencia:
Nada más perjudicial que confundan tu producto con el de la competencia, es así de simple, lo anterior puede robarte ventas o traerte mala publicidad. Lo mejor es crear una identidad que destaque y por la que te reconozcan fácilmente.
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5. Sin control de calidad:
Esto ocurre principalmente en la línea de producción del artículo, pero también es perjudicial en los empaques, ya que un packaging defectuoso podría afectar tanto al producto como la percepción del cliente. Esto incluye si no se realiza pruebas previas y no existen mejoras en el diseño.
6. Empaque sin diseño:
Opuesto al punto número uno, un packaging funcional, pero sin diseño, protegerá al producto pero no llamará la atención del cliente y no se venderá. Es fundamental equilibrar todos los elementos para crear un empaque balanceado entre funcionalidad y diseño, aunque recuerda que el exceso de éste también se considera carencia de estilo.
