Una de las agencias creativas mexicanas que han logrado desde hace tiempo obtener un lugar importante dentro de nuestro Ranking de agencias creativas anual es Devórame otra vez, firma mexicana que cuenta con una experiencia de diez años.

Primero como agencia digital y ahora como una compañía integral de creatividad, Devórame otra vez debe su nombre a esa tendencia que otras empresas han adquirido de adoptar el título de canciones, diálogos o frases que forman parte del imaginario colectivo, como esta conocida canción que tiene, entre otras, una conocida versión en salsa.

Paredro tuvo la oportunidad de conversar con dos de los tres socios al frente de Devórame Otra Vez: Mauro Hidalgo – Director Creativo y Érika Kashiwagui – Directora Comercial, quienes nos hablaron de su compañía y su visión acerca del panorama creativo actual.

Mauro describe la manera en que se han conducido a lo largo de diez años: “Somos una agencia que no nos clavamos en el show de estarnos mostrando ni nos estresamos con los números. Y eso es bueno porque entonces nos adentramos en el desempeño y en hacer las cosas bien”.

La independencia creativa de la compañía es una de las cualidades con las que han contado desde la fundación de la firma: “Es mejor haber surgido independientes aunque a veces hayan complicaciones a nivel presupuesto. Es más reconfortante poder moverte a placer, decidirse sólo por los proyectos que nos apasionan y hacer que fluya más la creatividad”.

Acerca del capital humano, Érika no duda en asegurar que se trata del activo más importante en Devórame otra vez: “El equipo humano es la fortaleza de nuestro trabajo, es muy importante que el equipo se sienta tranquilo, seguro en el lugar donde trabajan. A veces nos imaginamos como una comuna hippie de 35 personas en la cual buscamos trabajar con la libertad que los proyectos requieren”.

Erika y Mauro arrancaron juntos este proyecto pero se conocieron desde antes, cuando estudiaban en la universidad. Si bien se centraron en un principio en realizar todo tipo de acciones al interior de la firma, con el tiempo lograron dividir las tareas. Así, Mauro se enfocó en la parte creativa mientras que Érika se avocó a la parte administrativa. La mancuerna, junto con otros integrantes claves, ha dado diez años de éxitos que se cumplirán en julio próximo.

Devórame otra vez arrancó como una agencia digital, pero los años y la experiencia mostraron que lo digital está, finalmente, en todo. Lo importante era reforzar los aspectos creativos y por eso hoy se pueden considerar en este tenor con mucha mayor certeza. El crecimiento y evolución se ha dado conforme se va moviendo la creatividad, con los adelantos tecnológicos y el desarrollo de las redes sociales:

“Comenzamos como agencia digital y a los cinco años migramos a ser una agencia creativa, por necesidades propias del negocio. Nos gusta hacer conceptos creativos, animación, ilustración y branding.” explica Mauro.

 

Lo que deben hacer los jóvenes creativos
Acerca de los retos con los que se han enfrentado en este tiempo, Mauro reflexiona: “La visión que hay que tener es fundamental, saber hacia dónde se mueve el mercado, así dejamos de ser agencia digital y nos enfocamos más en los conceptos creativos y nos constituimos como agencia creativa. Las ideas, conceptos y estrategia son elementos muy importantes, qué y cómo lo quieres comunicar”.

También preguntamos a estos especialistas de la creatividad acerca de alguna recomendación que puedan darle a los jóvenes que se inician en espacios de creatividad. Mauro asegura que lo primordial es “Creer en un proyecto y no basarse en un anhelo económico, sino enamorarse de veras del trabajo, saber lo que se hace y entregarse a él. No te va a pesar si lo haces con pasión, si lo haces tuyo”.

 

A su vez, Erika asegura que lo primordial es “identificar tus fortalezas y habilidades, y explotarlas, reconocer en qué eres bueno, basar tu portafolio en ello y fortalecerlo de esta manera para hacerse notar”.

Marcas y clientes de gran nivel
Acerca de los proyectos más valiosos en los que se han podido involucrar, Mauro no duda en afirmar: “Todos los proyectos son importantes, pero algunos nos han enamorado más, como la marca japonesa de estilógrafos Artline, con quienes ya llevamos varios años trabajando. Ellos confían en nosotros y cada vez creamos conceptos más divertidos y arriesgados”.

“Sealy, la marca de colchones norteamericana, también ha tenido confianza en nosotros desde hace ya nueve años a través de campañas digitales y conceptos creativos.

A su vez, Érika afirma: “Hay clientes que te dan solidez, por ejemplo Wal Mart lleva siete años con nosotros. Hemos hecho una relación de trabajo sólida y obtener confianza. Quaker State, Grupo Presidente y KPMG por ejemplo, también han confiado en nosotros”.

Crecer bajo tres directrices en 2018
Para este año la premisa seguirá siendo la misma: divertirse. “Somos una agencia hippie porque no nos ponemos tanto a planear de manera tan fría. Sabemos y tenemos indicadores claros, pero es más relevante para nosotros fortalecer proyectos que nos interesan.

Mauro y Erika revelan las directrices que este año quieren seguir las cuales son tres: “Estamos por abrir un proyecto educativo de cursos para cualquier persona que esté interesada, de manera gratuita. Los colaboradores de Devórame Otra Vez podrán brindar cursos según su especialidad. Tenemos también a la visita un proyecto de voluntariado y por último pensamos que podemos hacer cosas más ricas en cuanto a la parte artística.

 

 

Sumarse a las causas valiosas con creatividad
Por último, nuestros entrevistados reflexionaron acerca de las tareas que la creatividad adquiere. Mauro afirmó que “vemos las cosas en pro de sumar para hacer un México mejor, si bien es cierto que hacemos publicidad y tenemos un pie en el infierno, nos podemos enfocar en aportar, en buscar gente con valor dentro de nuestro equipo de trabajo. Contratamos gente grande para que la agencia sea grande, hay que generar talento y eso es mejor que pelear por cuentas y contratos”.

Erika, por su parte finaliza: “Estoy orgullosa de que en Devórame Otra vez hemos formado un familia, la gente viene a trabajar por gusto. Chamba es chamba, sin duda alguna, pero debe gustarte lo que haces y ese es el objetivo que queremos lograr con nuestro capital humano.

“Devórame es un lugar de trabajo con un ambiente sano, de confianza, de trabajo colaborativo con la conciencia de que aquí todos dependemos de todos”.

Mauro y Érika