Inspirado por su cultura y la región de la que proviene, el artista con sede en Filipinas Jordan Mang-Osan, hace uso máximo de la energía solar y no precisamente para recargar pilas, sino para diseñar impresionantes obras de arte con los penetrantes y calurosos rayos del sol.
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Bajo la técnica llamada “pirograbado”, Mang-Osan aprovecha de la energía solar para crear diversas piezas de arte de diferentes tamaños. El artista tiene una descendencia étnica igorrote, esto quiere decir que es un ndividuo perteneciente a un pueblo que vive en la región montañosa del norte de la isla de Luzón (Filipinas). Los igorrotes se dedican a la agricultura y trabajan los metales.
A él le gusta trabajar con materias primas, indígenas y se centra en el tema que celebra la rica herencia de su pueblo y su país, por lo que mantiene muy arraigadas sus raíces.
El artista con sede en Filipinas Jordan Mang-Osan aprovecha la energía del sol para crear dibujos “pirograbados”. El artista, que es un individuo perteneciente a un pueblo en la región montañosa del norte de la isla de Luzón dedicados a la agricultura y trabajan los metales.
Después de esbozar un diseño, Mang-Osan utiliza una lupa para concentrar el calor solar en las áreas seleccionadas. El calor ataca líneas oscurecidas en la madera, lo que da como resultado impresionantes paisajes o un elaborado retrato.
La paciencia y la habilidad de Mang-Osan es evidente en su obra, ya que debe manipular con cuidado la lupa y la luz solar con el fin de grabar cada detalle intrincado en el transcurso de varios meses.
